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El proceso completo básico de Rolfing consiste en una serie de 10 sesiones de aproximadamente 90 minutos cada una.

 

En cada una de las sesiones se trabaja con unos objetivos concretos y sobre unas zonas del cuerpo determinadas, siempre adaptándose a las características y necesidades individuales de la persona.

 

Durante todo el proceso se trabaja a nivel estructural y manipulativo, funcional y perceptual.

 

El proceso sigue una secuencia lógica que permite que la persona pueda ir experimentando y asimilando la información, y así, al completar las 10 sesiones, se hayan integrado los cambios de manera significativa y duradera en el tiempo.

 

Una vez completada la serie básica de 10 sesiones, si la persona lo desea, se pueden seguir realizando sesiones y seguir trabajando en determinados aspectos a modo de mantenimiento.

Antes y después de un proceso completo de Rolfing

Rolfing®, Rolfer® y el “Little boy logo” son marcas registradas por The Rolf Institute Boulder CO (EE.UU.)  Sólo los profesionales formados y acreditados por dicho instituto pueden impartir dicha técnica

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